Historia pura. La argentina Nadia Podoroska, que entró al cuadro principal de Roland Garros desde la clasificación, se metió este martes en la semifinal del Grand Slam de París tras vencer por 6-2 y 6-4 a la ucraniana Elina Svitolina, N°5 del mundo. Un verdadero cuento de hadas para la rosarina.
Este triunfo, el más importante en lo que va de su carrera, la depositará nada en el Top 50 del ránking mundial, otro alcance impresionante para la argentina, que logró su triunfo más importante nada menos que en el Philippe Chatrier, el estadio principal del torneo de París.
“Es muy difícil para mí hablar después del partido, estoy muy feliz”, dijo La Rusa. “Sé que hay mucha gente en Argentina viendo mi partido, siguiéndome, es mucho el apoyo que estoy recibiendo, para mí es muy importante y un honor poder darles esta alegría en este difícil momento que están pasando por la pandemia”, destacó.
Nadia jugó un tenis de altísimo nivel para lograr su victoria. Las estadísticas indican que la argentina firmó 30 tiros ganadores contra solo ocho de su rival a lo largo del encuentro, y que aprovechó ocho de las 13 oportunidades de quiebre que generó durante una hora y 19 minutos de juego.
Su próxima rival, ya como una de las cuatro mejores del Grand Slam de París, saldrá de la ganadora del cruce de cuartos de final entre la italiana Martina Trevisan y la polaca Iga Swiatek.
La rosarina, primera tenista de la Era Abierta en clasificarse a las semifinales tras venir desde la clasificación, venía de ganarle en octavos a la checa Barbora Krejcikova por 2-6, 6-2 y 6-3, lo que ya era todo un logro histórico para el tenis femenino nacional, mientras que la nacida en Odesa le había ganado a la tenista de Francia Caroline Garcia por 6-1 y 6-3.
Podoroska es ya, por derecho propio, una de las sensaciones del torneo. Del anonimato internacional pasó a los cuartos de final y a mirar de frente a las mejores gestas del tenis argentino. Con su triunfo de hoy igualó la actuación de Paola Suárez, la última argentina en semifinales de París, en la edición 2004, instancia en la que cayó ante la rusa Elena Dementieva.
La jugadora de 23 años, hoy 131° del mundo pero desde el lunes Top 50, sigue con su sueño a paso firme.
