Una de las últimas esperanzas de conseguir una medalla en los Juegos Olímpicos de París se esfumó esta tarde en el Stade de Bordeaux donde la Selección Argentina de fútbol cayó por 1-0 ante Francia y quedó al margen del torneo en los cuartos de final.
Jean Philippe Mateta, a los 4 minutos de la primera parte, le dio el triunfo al conjunto anfitrión en un escenario hostil para el conjunto albiceleste de inicio a fin. Argentina creció desde los 20 minutos del primer tiempo, pero estuvo poco fino para resolver en el primer tiempo y le costó generar peligro en un complemento que fue de ida y vuelta.
Argentina fue un equipo en los 20 minutos iniciales y otros en los 25 finales de la primera mitad. Al principio entró dormido, se mostró lento y vulnerable atrás, como cuando a los 4 minutos Mateta cabeceó en el primer palo un córner ejecutado desde la derecha. Durmió su marcador y también el defensor del primer palo y Francia se puso en ventaja rápidamente.
Y pudo haber goleado en ese primer tramo el elenco anfitrión, que dispuso de varias chances aprovechando la fragilidad de la última línea albiceleste. Pero de mitad de cancha hacia adelante Argentina tampoco tenía mucho para rescatar. El traslado era lento, sobre todo a la hora de salir del fondo, y las llegadas brillaban por su ausencia.
Hasta que en un córner rival nació una contra que casi convierte en el empate Kevin Zenón. A partir de ahí Argentina repuntó, con mejores desempeños de Medina, Equi Fernández y Thiago Almada, y se hizo merecedor de un empate que no llegó en esos 45 minutos.
Chances hubo de sobra: un disparo de Equi Fernández que rechazó el arquero galo cerca del ángulo, un cabezazo de Otamendi y la más clara, un cabezazo de Simeone solo frente al arco, tras pase de Medina, que el delantero, de muy buen torneo, impactó mal y mandó el balón dos metros por encima del travesaño.
En el complemento, Argentina se volcó decididamente a campo francés, mientras que los galos intentaron llegar de contragolpe, pero con poca gente. Dejaron muchos jugadores atrás y no le permitieron al equipo orientado por Javier Mascherano generar situaciones nítidas pese a tener por mucho más tiempo la pelota.
Los minutos fueron transcurriendo, con un gol anulado a Francia por el VAR, hasta que el final llegó, tras dos opciones claras desperdiciadas, y con el se acabó el sueño argentino de subirse al podio.
