La Corte Suprema de Justicia le ordenó a la empresa Tabacalera Sarandí que pague el impuesto a los cigarrillos. Se trata de la empresa de Pablo Otero, conocido como “Señor Tabaco”. El máximo tribunal hizo lugar a una presentación de la AFIP contra la ejecución de una sentencia que había conseguido la empresa en marzo, de parte de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal, que la habilitaba a seguir sin pagar tributos.
Otero había ganado una significativa participación en el mercado del tabaco mediante la venta de cigarrillos a precios muy bajos, amparado por medidas cautelares que le permitían evadir impuestos. Este crecimiento agresivo había puesto en jaque a competidores y al propio sistema fiscal. Ahora el fallo de la Corte determinó la suspensión de la ejecución de las sentencias que habilitaban a la compañía a no pagar el tributo.
La resolución tuvo los votos del presidente de la Corte, Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, mientras que Carlos Rosenkrantz se excusó porque en el pasado fue abogado de la tabacalera Massalin. El máximo tribunal fundamentó la decisión al considerar que la Cámara “en la práctica, ha inhibido potestades fiscales por un monto excepcionalmente elevado y alterado el efecto del recurso interpuesto por la apelante contra la sentencia de fondo, requiriendo para ello solamente la caución juratoria de la parte apelada”.
La Corte además le dio vista a la Procuración General para que se pronuncie sobre la cuestión de fondo, planteada por Tabacalera Sarandí, sobre si el impuesto es constitucional o no. Una vez emitido ese dictamen los integrantes del máximo tribunal estarán habilitados para fallar sobre la cuestión de fondo. Desde 2016 se estima que los recursos fiscales perdidos ascendieron a más de US$2517 millones. Solo en 2023 las pérdidas alcanzaron aproximadamente $202.500 millones.
Qué dice el fallo de la Corte que le ordenó al “Señor Tabaco” que empiece a pagar el Impuesto a los cigarrillos
El fallo de la Corte que le ordenó a Otero, conocido como “Señor Tabaco”, que empiece a pagar el Impuesto a los cigarrillos, dice que “corresponde la suspensión del incidente de ejecución de sentencia si los argumentos planteados en el recurso extraordinario y mantenidos en la queja podrían, prima facie, y sin que implique pronunciamiento sobre el fondo de la cuestión debatida”.
La resolución advirtió: “El hecho es que, si la sentencia es revocada, Tabacalera Sarandí, no sólo tendrá que pagar de ahora en adelante, sino que podría ser ejecutada por todo lo que no pagó desde hace años, lo que es una cifra multimillonaria”.
