El delantero no seguirá en PSG y su representante se refirió a lo que viene, con el Xeneize en lucha con otros clubes para tenerlo a partir de la próxima temporada. ¿Se dará?
A pesar del parate por el coronavirus, Boca piensa en el futuro mercado de pases. En reforzar el equipo para que una vez reanudada la actividad, se pueda dar pelea ardua pelea en todos los frentes abiertos: torneo local, Copa Argentina y Copa Libertadores, el gran sueño de Miguelito Russo y compañía. El gigante anhelo tras trece años sin poder levantarla. Y hay un nombre que desvela a todos. Difícil de adquirirlo, seguro. Muy. Pero por ahora no imposible.
La ilusión nació meses atrás, cuando el atacante dijo que le gustaría jugar en la Bombonera y gritar los goles como lo hacía Manteca Martínez. Después, mantuvo charlas contadas por su compañero Leo Paredes y también con Carlitos Bianchi sobre cómo es el planeta azul y oro. Incluso, esto se hizo público hace poco. "Es un deseo, es una posibilidad", había expresado en su momento el Patrón Bermúdez, esperanzado como todos los hinchas.
Aunque claro, no es nada fácil desde lo económico y más en plena crisis. Porque Boca, en una época de austeridad al igual que el resto de los clubes argentinos, tiene que competir con entidades europeas, indudablemente más fuertes a la hora de poner los billetes sobre la mesa. Encima, desde el Viejo Continente se ha sentenciado que Cavani pretende ganar doce millones de euros al año. Desde ese lugar, es imposible para la institución que preside Ameal.
Sin embargo, las recientes declaraciones del representante de Cavani volvieron a encender la llama de la fe. Más de uno se volvió a hacer la película con el yorugua colgado de uno de los alambrados de la Bombonera. ¿Por qué? Porque dijo que no está descartada ninguna oferta. "Vamos a escuchar y ver las opciones", agregó Walter Guglielmone, hermanastro y apoderado del punta. Además, contó que PSG le ofreció la chance de jugar lo que queda de la Champions antes de partir hacia un nuevo destino. Inter de Italia es uno de los competidores para Boca, que deberá apelar puntualmente a lo sentimental y pasional para tenerlo.
Mientras sigue aguardando novedades respecto al hombre de 33 años que está de otro lado de charco en su Salto natal, Boca va delineando el armado de su futuro ataque: Tevez y Zárate tienen que renovar, por Soldano se debe negociar un nuevo préstamo, Villa está con el conocido asunto judicial por violencia de género y después deben volver al club Walter Bou y Mateo Retegui. Ahí, Russo deberá analizar qué hace con ellos.
