El merendero en el que Navarro trabajaba desde hace varios años se llama Otti y allí acuden diariamente entre 50 y 100 chicos a tomar la leche.
Según explicaron desde Barrios de Pie, las mujer de Navarro, sus tres hijos, su yendo y tres nietos se encuentran ahora aislados en su casa dentro del barrio por prevención.
Navarro fue diagnosticado hace unos diez días. Primero fue aislado en un hotel en Recoleta. Luego, cuando su condición empeoró, fue trasladado al Hospital Ramos Mejía. Su cuadro se complicó porque también padecía algunos problemas respiratorios.
En un comunicado, Barrio de Pie señaló: “Con el avance de la pandemia en los barrios populares, somos los militantes sociales quienes día a día ponemos el cuerpo. Junto a la familia, los integrantes del movimiento y los vecinos del barrio estamos transitando este doloroso momento”.
Según el último parte difundido por el Ministerio de Salud porteño, en la ciudad se registraron un total de 6660 casos positivos y 189 víctimas fatales.
A fines de abril, mientras las estadísticas oficiales confirmaban la llegada de la pandemia de coronavirus a las villas de la ciudad de Buenos Aires y el número de casos empezó a crecer de forma dramática en casi todos los barrios populares, grandes sectores de la Villa 31 y 31 bis en el barrio porteño de Retiro quedaron sin agua.
La falta de agua se superpuso a la situación ya crítica de la 31, una de las más grandes de la ciudad, con un grave problema de hacinamiento y escasez de recursos, que ahora también se agrava en medio de la emergencia sanitaria.